
La columna vertebral es una estructura única en la que se piensan hasta el más mínimo detalle. Nuestra tarea es protegerla y ella, a su vez, protege la sensible y vulnerable médula espinal. Un ligero desplazamiento de la vértebra y una compresión débil del nervio provocan problemas graves. Los síntomas de la osteocondrosis dependen de la etapa de desarrollo y localización del proceso. La osteocondrosis lumbar es más común; en una cuarta parte de los pacientes, las vértebras cervicales se ven afectadas. Pero, como ya hemos dicho, la osteocondrosis es un concepto amplio y vago, por lo que para detallar la patología es necesaria la consulta con un especialista con experiencia y conocimientos.
Patogenia de la osteocondrosis.
Según la patogénesis, los médicos distinguen 4 etapas en el desarrollo de la patología.
Nivel 1
En la primera etapa prácticamente no hay quejas, porque la enfermedad comienza imperceptiblemente para el paciente. Pero en lo profundo del disco intervertebral, debido a una carga inadecuada sobre el esqueleto, ya están apareciendo cambios, el núcleo se deshidrata, la elasticidad del cartílago que absorbe los impactos se reduce y la altura del disco tiende a disminuir. Durante este período, puede aparecer dolor al realizar movimientos incómodos o al permanecer en una posición durante mucho tiempo, pero los síntomas clínicos desaparecen.
Etapa 2
La enfermedad progresa, la cápsula fibrosa se destruye, se agrieta, la distancia entre los cuerpos vertebrales disminuye, los ligamentos se hunden y las raíces nerviosas se pellizcarán. Hay quejas de dolor, que se intensifica con el movimiento de la columna. En esta etapa, el paciente ya consulta a un médico. Las vértebras se vuelven móviles. Si una persona es demasiado activa y móvil, puede resbalar y desplazarse.
Etapa 3
La enfermedad está progresando. El revestimiento del cartílago entre los discos se vuelve más delgado. El anillo fibroso se rompe, aparecen prolapsos y protuberancias. La irritación de las terminaciones nerviosas provoca síntomas vívidos, que dependen de la ubicación de la patología. El dolor de espalda intenso sólo puede aliviarse con analgésicos fuertes.
Etapa 4
Aparecen nuevos crecimientos óseos en la columna, que representan un mecanismo adaptativo para proteger el esqueleto principal del cuerpo. Los osteofitos estabilizan la columna, tratando de compensar la tensión excesiva sobre ella. Pero estas excrecencias dañan aún más el segmento y las raíces nerviosas, agravando así la enfermedad. Las articulaciones tienen movilidad limitada debido a los osteofitos. Aunque el dolor es cada vez menor, ahora incluso los movimientos simples resultan difíciles, se forma anquilosis y la columna queda completamente inmovilizada. El paciente no puede cuidar de sí mismo y queda discapacitado.
Principales síntomas de la osteocondrosis.
A medida que avanza la enfermedad, la circulación sanguínea se deteriora, aparece espondilosis y se forman hernias intervertebrales. El paciente presenta las siguientes quejas:
- dolor en el cuello (especialmente después de despertarse), coronilla, cintura escapular, costillas, espalda baja;
- sensación de fatiga y rigidez en la espalda;
- la aparición de dolor al levantar pesas;
- parestesia en las extremidades;
El cuadro clínico de la enfermedad depende de la localización del proceso, además, la osteocondrosis suele complicarse con otra patología. Por lo tanto, hay muchas quejas y son tan variadas que el diagnóstico basándose únicamente en una lista de síntomas perturbadores puede resultar difícil.
Signos característicos de la osteocondrosis cervical:
- dolor en el cuello, tensión en la cintura escapular;
- entumecimiento de los dedos;
- problemas para dormir;
- migraña;
- mareos periódicos (especialmente con una inclinación brusca de la cabeza o giros activos del cuello);
- la aparición de manchas ante los ojos y otras molestias visuales;
- pérdida repentina del conocimiento;
- Estado de depresión, sentimiento de melancolía inexplicable.
Signos característicos de la osteocondrosis torácica:
- dolor en la espalda, costillas y corazón;
- problemas respiratorios;
- desórdenes gastrointestinales;
- sensación de piel de gallina recorriendo todo el cuerpo
Signos característicos de la osteocondrosis lumbar:
- dolor (lumbago) en la región lumbar;
- dolor u hormigueo en las piernas;
- entumecimiento de los dedos de los pies;
- problemas con la potencia;
- disfunción ovárica;
- deposiciones y/o micción involuntaria
Menos comunes son las formas de osteocondrosis de tipo mixto.
Diagnóstico de osteocondrosis.
Realizar un diagnóstico consiste en examinar al paciente, entrevistarlo y analizar datos instrumentales.
Entrevista al paciente
Durante la primera visita, el médico examina las molestias del paciente y averigua la localización, la intensidad, la duración del dolor, la influencia del estrés cotidiano sobre el dolor, así como las medidas terapéuticas previas, formulando determinadas preguntas, por ejemplo, las siguientes :
- cuánto dura el dolor (menos de 12 semanas o más);
- el dolor apareció después de una caída, lesión o giro brusco;
- el dolor aparece en un lado;
- el dolor apareció inmediatamente después de levantar la carga;
- el dolor se acompaña de hormigueo en manos y pies;
- durante el dolor, el movimiento de las extremidades es difícil;
- durante el dolor, se observa vaciamiento espontáneo de los intestinos o la vejiga;
- el dolor que surge interfiere con la marcha, se irradia a alguna parte;
- Últimamente su espalda se ha vuelto más dolorosa o rígida;
- si recientemente ha estado en reposo prolongado en cama;
- si el paciente estaba en una silla especial;
- es el dolor localizado entre los omóplatos;
- ¿te molesta el dolor de cabeza?
- ¿Hay algún cambio en la visión y (o) la audición?
- si existen cargas a largo plazo en la vida cotidiana;
- ¿Hay algún problema con la sensibilidad de los dedos de los pies y las manos?
- si la actividad profesional está asociada a factores de riesgo;
Examen fisiológico.
Además de examinar al paciente, se realiza un examen neurológico: se determinan los reflejos espinales y la sensibilidad de ciertas zonas y se examina la prueba de Lasegue.
- se evalúan la posición del cuerpo, la marcha y la amplitud de movimiento del paciente;
- se examina la piel para identificar áreas de hiperemia, descamación y erupción;
- se detectan músculos espasmos e hinchazón;
- se identifican áreas con aumentos de temperatura locales;
radiografía.
La radiografía examina la columna en su totalidad. La imagen muestra el estado de las vértebras, se pueden ver los crecimientos, la altura de los discos y las dimensiones entre las vértebras.
TC y resonancia magnética.
Los métodos determinan la ubicación exacta del defecto, el estado de los discos, la presencia de una hernia, la imagen es más detallada (especialmente con la resonancia magnética)
Dopplerografía vascular y electromiografía.
Estos métodos adicionales ayudarán a identificar el problema o reconocer otra patología.
Pruebas de laboratorio.
Las pruebas clínicas examinan los biofluidos humanos y permiten un diagnóstico más preciso.
Los métodos de investigación adicionales ayudarán a reconocer las causas no vertebrales de la patología.
Consulta con otros especialistas.
Si el médico necesita consultar a otro especialista, deriva al paciente a un neurocirujano, cirujano, neurólogo, reumatólogo o terapeuta. A veces es necesario convocar un consejo de médicos para decidir un diagnóstico.
Complicaciones de la osteocondrosis.
Los procesos destructivos conducen a una pérdida gradual de la función espinal. La compresión de nervios y vasos sanguíneos provoca nuevos problemas y enfermedades:
- deterioro de la visión, hasta su pérdida;
- cambio de audición;
- hernia espinal;
- espondiloartrosis;
- "lumbago" sistemático en la zona lumbar;
- espondilosis;
- insuficiencia funcional de los órganos genitourinarios
- estrechamiento del canal espinal
Para evitar que la situación empeore y evitar una discapacidad, es necesario consultar a un médico a tiempo para obtener ayuda calificada. La demora sólo empeorará la situación.